Pleat Box nace tras diseñar digitalmente la caída del pliegue textil y aplicarlo a la cerámica. Así pues, uno de los diseños más artesanales de Marset sorprendentemente tiene su origen en el ámbito digital.

La cerámica es un material dúctil, moldeable y en el que hay margen para intervenir y conseguir que cada producto sea único. Fusionar la arcilla con distintos esmaltes le permite a Xavier Mañosa descubrir e interpretar nuevos efectos de luz. Tanto es así que si el interior es esmaltado blanco brillante genera unos destellos que enriquecen la luz, y si en cambio está bañado en oro de 24 quilates emite una luz extraordinariamente cálida.